Es el día de leer la previa NBA 2024-25 Oklahoma City Thunder. Datos, resultados de la temporada anterior, un vistazo a su plantilla y a sus futuros agentes libres, los objetivos del curso, el jugador a seguir y un pronóstico sobre la franquicia.
Oklahoma City Thunder
- Balance 2023-24: 57-25 (1º del Oeste).
- Entrenador: Mike Daigneault (5ª temporada en el equipo).
- Agentes libres más importantes en 2025: Alex Caruso.
- Historia: Los jugadores más importantes de la historia de los Oklahoma City Thunder.
La plantilla
- Movimientos en el mercado: Traspaso por Alex Caruso, firma de Isaiah Hartenstein y renovaciones de Aaron Wiggins e Isaiah Joe (aquí todos los movimientos).
- Backcourt: Shai Gilgeous-Alexander, Jalen Williams, Kenrich Williams, Luguentz Dort, Aaron Wiggins, Cason Wallace, Isaiah Joe, Ousmane Dieng, Dillon Jones, Nikola Topic, Ajay Mitchell (dual), Alex Ducas (dual) y Adam Flagler (dual).
- Frontcourt: Chet Holgrem, Isaiah Hartenstein y Jaylin Williams.
Así encaran la temporada
Los Oklahoma City Thunder encaran esta nueva temporada con una gran ambición y unas tremendas ganas de comerse el mundo. Y no es para menos. La pasada campaña resultó ser una clara demostración de intenciones: los 40 triunfos logrados en el curso 2022-23 se transformaron, en apenas un año, en 57 victorias, el liderato de la Conferencia Oeste y una participación en playoffs saldada con derrota en seis partidos ante los Dallas Mavericks en Semifinales de Conferencia. La eliminación dejó un sabor agridulce tras firmar una excepcional temporada, pero, a su vez, demostró el tremendo potencial de un proyecto que todavía no se ha acercado, ni mucho menos, a su techo.
Lo más valioso de este tropiezo señaló a la identificación de las principales carencias estructurales del equipo, principalmente en lo que respecta a la ausencia de centímetros en la pintura más allá de Chet Holmgren, la debilidad en el rebote y algún que otro ajuste incómodo en el juego exterior. Por ello, Sam Presti optó por la cautela a la hora de abordar el mercado estival, donde priorizó la adquisición de complementos para reforzar estas fisuras en vez de cerrar algún movimiento de gran magnitud.
La incorporación más destacada fue la de Isaiah Hartenstein, un pivot que aporta dureza interior, capacidad reboteadora y algunos recursos en ambos postes, como ya demostró durante su etapa con los New York Knicks. Su presencia promete ser un bálsamo para Chet Holmgren, quien en su año de debut exhibió un gran nivel y una impresionante adaptación al sistema de los Thunder, aunque, por momentos, necesitó de otro pilar, más físico, a su lado, para hacer frente a los rivales más exigentes. La dupla Hartenstein-Holmgren promete equilibrar el juego interior, ofreciendo tanto una buena dosis de protect rim como de versatilidad ofensiva en los tres niveles de la cancha.
La idea es que Chet pueda desempeñarse con mayor libertad en ataque, jugando más lejos del poste, mientras Hartenstein asume la tarea de cargar el rebote y reforzar la defensa. La principal incógnita es si, a la hora de la verdad, ambos son capaces de coexistir y complementarse para sumar réditos positivos para su equipo. De momento, Hartenstein deberá esperar para regresar a la acción tras ser diagnosticado con una fractura de muñeca que le hará perderse, al menos, el primer mes y medio de competición.
Además, Oklahoma City sumó a Alex Caruso, uno de los especialistas defensivos exteriores más cotizados, tanto por calidad como por precio. El ex jugador de Chicago Bulls y Los Angeles Lakers suplirá a un Josh Giddey que, pese a su incuestionable calidad, había dejado de tener sitio ante el liderazgo de Shai Gilgeous-Alexander, el paso adelante dado por Jalen Williams y el mejor quehacer en el triple de compañeros como Isaiah Joe o Aaron WIggins. El enfoque de Daigneault, galardonado con el premio al Entrenador del Año la temporada pasada, ha sido mantener la intensidad defensiva que caracterizó al equipo, complementada ahora con la experiencia de Caruso y la fortaleza de Hartenstein en la pintura.
A nivel colectivo, el gran interrogante volverá a girar alrededor de la juventud de los Thunder. Con una edad media de apenas 24 años, todavía existen dudas acerca de si la plantilla será capaz este año, de dar el salto necesario en playoffs, donde volverá a medirse, si nada se tuerce, a equipos mucho más veteranos en este tipo de escenarios. Si bien lograron terminar entre los cinco mejores en eficiencia ofensiva y defensiva la campaña pasada, esa inexperiencia quedó expuesta ante unos Mavericks que supieron capitalizar los errores de un equipo aún en crecimiento. Sin embargo, la consistencia de Gilgeous-Alexander, quien se ratificó como uno de los mejores jugadores de la NBA tras quedar segundo en las votaciones para el MVP de la temporada, sumada a la mejora continua de Holmgren y Williams, le da a los aficionados de los Thunder motivos de sobra para soñar con competir por cotas muy altas.
En un Oeste altamente competitivo, Oklahoma City se presenta a esta nueva temporada con una mezcla casi perfecta de talento joven, equilibrio y voracidad ganadora. Si las nuevas incorporaciones funcionan como se espera y el núcleo de jóvenes sigue progresando, el techo de este equipo es muy alto: repetir el primer puesto de la conferencia y alcanzar las ansiadas Finales de la NBA, algo que no logran desde 2012. En el mejor de los casos, Shai Gilgeous-Alexander podría hacerse con el MVP, mientras que Holmgren y Williams serán seriamente considerados para debutar en el All-Star Game. Por si fuera poco, la capacidad de Presti para mantener la flexibilidad financiera y todas las selecciones de draft recopiladas en los últimos años ofrecen al equipos un margen de maniobra tremendo, también desde las oficinas, a lo largo de la temporada. En una liga donde la juventud suele ser un obstáculo, los Thunder buscan ser la excepción que confirme la regla.
El jugador a seguir
Jalen Williams es el nombre que muchos aficionados y analistas han puesto en el foco como potencial catalizador del paso adelante que desean dar los Thunder este curso. Después de un notable año sophomore, Williams se ha consolidado como una de las piezas clave en el esquema de Mark Daigneault, y la temporada 2024-25 podría ser la que lo catapulte al estatus de All-Star. Su habilidad para jugar en distintas posiciones de la cancha y cumplir diversos roles, combinada con un cuerpo físico privilegiado y su versatilidad defensiva, le han permitido asentarse como una presencia constante en ambos extremos de la cancha.
De hecho, Williams ha demostrado que puede ser mucho más que un complemento para Shai Gilgeous-Alexander, de quien deberá descargar cierta responsabilidad ofensiva en favor de una ofensiva menos predecible. El asentamiento de su lanzamiento exterior y su creación con el balón añade una capa extra de creatividad al ataque de Oklahoma City, lo que resultará clave en situaciones de media cancha y en momentos de máxima tensión durante los playoffs.
Su reto esta campaña no será solo consolidar su juego y ser más consistente, sino asumir un papel protagonista cuando el equipo lo necesite. La presencia de Isaiah Hartenstein y Alex Caruso debería facilitarle el trabajo defensivo, permitiéndole concentrarse más en el aro rival. Si Williams logra dar un paso adelante, no sería descabellado verle debutar en el All-Star. Y, más importante aún, ser el factor X que lleve a los Thunder a dar ese salto definitivo en la postemporada.
Previa NBA 2024-25 Oklahoma City Thunder, pronóstico
Sobre el papel, los Oklahoma City Thunder parecen destinados a mejorar e incrementar la cantidad de triunfos logrados el pasado curso. Cuentan con una plantilla amplia, versátil, equilibrada y, lo que es más importante, con margen de mejora por delante. Por ello, ni siquiera los quintetos y planteamientos más extravagantes de Mike Daigneault suponen un obstáculo para atacar las 60 victorias. Esto también supone un arma de doble filo para un equipo que sigue siendo muy joven: la presión de saber que cualquier cosa que no sea jugar las Finales de Conferencia será considerado un fracaso.
- Balance: Entre 58 y 64 victorias.
- Posición: 1º del Oeste.
- El máximo al que aspiran: la tendencia reciente del equipo, el desarrollo de su núcleo joven y las notables incorporaciones sitúan su techo en las Finales de la NBA.
- Si se tuercen las cosas: no tienen un juego interior muy profundo. Alguna lesión (ya se ha producido la de Hartenstein) y/o mal ajuste que suponga caer hasta el cuarto o quinto puesto, donde les espere un desafortunado cruce en playoffs ante unos Nuggets o Suns a pleno rendimiento y más experimentados podría enviarlos a casa en primera ronda.
Anterior equipo analizado: Minnesota Timberwolves Próximo equipo: Denver Nuggets .
(Fotografía de portada de Joshua Gateley/Getty Images)